Las consecuencias de la victoria de Sebastien Ogier en el último Rally de Portugal sobre los pilotos oficiales del equipo Citroën no se han hecho esperar. Evidentemente el perjudicado no ha sido Sebastien Loeb, sino el español Dani Sordo que en esa prueba lograba un tardio primer podio de la temporada. Olivier Quesnel director deportivo de la marca francesa ha decidido 'prescindir' de sus servicios en las pruebas que quedan por disputar con piso de tierra: Finlandia, Japón y Gales, no así en las de asfalto.
El piloto cántabro pasará de esta forma a correr al lado de Kimi Raikkonen, lo que le quitará la responsabilidad de llevar como fuera a la meta su Citroën C4 WRC para poder puntuar cara al Mundial de Marcas. El propio Sordo dará la razón o se la quitará a su patrón.