La firma automovilística sueca Saab, propiedad del fabricante de coches deportivos Koenigsegg, ha presentado su nuevo modelo 9-5, que representa el inicio de una nueva era en materia de diseño, tecnología y prestaciones para la marca, tras dejar de formar parte del consorcio General Motors.
Saab explicó que el nuevo 9-5 combina un novedoso diseño con las últimas innovaciones tecnológicas y nace con el objetivo de convertirse en una alternativa en el segmento de las berlinas premium. En este sentido, apuntó que este coche "anuncia la llegada de un nuevo lenguaje de diseño, más audaz y expresivo".
Este nuevo vehículo de la firma escandinava cuenta con un amplio equipamiento y tecnología, como por ejemplo la proyección de la información en el parabrisas, la iluminación adaptativa, así como el control adaptativo de la velocidad de crucero, el nuevo chasis adaptativo de la marca o el sistema de acceso y arranque sin llave. Elementos estos valorables en un automóvil, pero no exclusivos de la firma de origen sueco.
Al mismo tiempo, el nuevo Saab 9-5 incorpora otros elementos de equipamiento como climatizador inteligente de triple zona, asistente dinámico de aparcamiento y el sistema de tracción total AWD, que cuenta con diferencial autoblocante con control electrónico en el eje trasero.
Este nuevo automóvil contará con una gama de motorizaciones que parte desde los 1,6 litros y se podrá escoger entre tres tipos de combustibles diferentes, como son la gasolina, el gasóleo y el bioetanol E85.
El consejero delegado de Saab, Jan Ake Jonsson, indicó que este automóvil "marca el inicio de una nueva era" para la firma. "Hemos creado un producto muy diferente y avanzado aprovechando la fortaleza de nuestras raíces en áreas clave, como el moderno diseño escandinavo, el comportamiento deportivo y las prestaciones responsables", añadió.
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